26 febrero 2007

Caminantes lunares : Edgar Mitchell



En septiembre de 2002 tuve la suerte de estrechar la mano de otro caminante lunar : Edgar Mitchell, ex-astronauta de la NASA y piloto del módulo lunar en Apollo 14 en febrero de 1971.

Esta vez el contacto sería bien corto pero fructífero.

Mitchell había sido invitado por el Gobierno de la provincia de San Luis a un Forum organizado por la Fundación IDEIA, encargada de armar eventos con personalidades destacadas de todas las ramas de las ciencias y la tecnología.

El ex-astronauta vendría desde Estados Unidos y realizaría un fugaz paso por Buenos Aires, al otro día partiría desde el Aeroparque a la localidad de Potrero de los Funes en San Luis, donde se realizaba la convención. Esa era mi única oportunidad para saludalo.

Siempre estaré agradecido a Roberto Solans, editor de espacial.com por haberme avisado acerca de su inminente visita y de como rastrear los horarios de los vuelos hacia San luis para deducir en que momento el ex-astronauta podría ser localizado.

Tanto Charles Duke como Edgar Mitechel además de ser caminante slunares, representan para mi un verdadero comienzo en la labor periodística, por la entrevista que logré hacerle al primero y por el rastreo que tuve que hacer con el segundo.

El día señalado me presenté en Aeroparque, era una tarde con mucha niebla, lo que hacía suponer que los vuelos estaban demorados, tenía tiempo para buscarlo a Mitchell, pero los lugares donde podía estar eran variados y debo haber recorrido las instalaciones una hora hasta que pude dar con él.

Edgar Mitchell se hallaba con su familia chequeando los horarios de salida, me sorprendió saber que su segunda esposa, quien lo acompañaba en ese momento, es de origen argentino y fue ella quien gentilmente se ofreció para sacarnos la foto.

Con el sexto caminante lunar en Aeroparque

También andaba a cuestas con su reciente libro publicado en nuestro país, EL Camino del Explorador, donde relata como a partir de su viaje lunar pudo tener una nueva visión del Universo, base de fundación de una corriente científica llamada Noética.

No pude resistir la tentación de pedirle, además de la foto, un autógrafo en su propio libro :

Portada del libro El Camino del Explorador


Primera hoja del libro autografiada por Mitchell

Iniciamos una breve e improvisada charla con el astronauta momentos antes de que abordara el avión que lo llevaría a San Luis, durante la cual no dejó de mostrarse sorprendido que por estas pampas existan seguidores del programa espacial tripulado y nostálgicos del programa lunar Apollo.

Mitchell luego se fue pero me quedó la experiencia de haber conocido personalmente a otro astronauta de la época dorada de la NASA.

Biografía de Edgard Mitchell

Sitio particular de Edgar Mitchell

21 febrero 2007

Caminantes lunares : Charles Duke


Durante la segunda semana de septiembre de 2001 el ex astronauta Charles M. Duke Jr. estuvo en nuestro país brindando una serie de conferencias en donde detalló sus vivencias como oficial de la Fuerza Aérea y como astronauta de la NASA, participando como astronauta suplente en la misiones Apollo 13 y 17 y como piloto del módulo lunar en Apollo 16, en abril de 1972, misión que lo llevó a ser uno de los doce hombres que caminaron en la Luna.

El día 10 de septiembre, Charles Duke fue invitado por la Fuerza Aérea Argentina y el día 13 estuvo en la Universidad de San Andrés, en Victoria, Pcia. de Buenos Aires. Tuve la oportunidad y la suerte de verlo y realizarle un par de preguntas, si bien el clima durante la conferencia era distendido y ameno, era imposible ignorar los acontecimientos que se estaban sucediendo y estaban conmocionando al mundo, antes de la conferencia se advirtió al público que, por favor, no se tocara ese tema a la hora de realizarle las preguntas.

Universidad de San Andrés donde se realizó la charla con el ex-astronauta

Duke comenzó su charla por el final, o sea, agradeciendo a la Confraternidad Cristiana Evangélica de Miembros de Fuerzas Armadas y de Seguridad Argentina, que fue la entidad que lo trajo a nuestro país, a la Fuerza Aérea y por supuesto a las autoridades de la Universidad de San Andrés. He aquí las preguntas, que ha contestado con bastantes detalles interesantes...

Charles Duke mostrando una filmación de él mismo durante su caminata lunar

Como ha iniciado su camino para ser astronauta ?
Desde joven encaminé mi vida en busca de éxitos, luego de terminar mis estudios en la preparatoria de la Academia “Admiral Farragaut” en St. Petesburg, Florida, ingresé a la Academia Naval donde obtuve el título de Ingeniero en Ciencias Físicas. Pero mi predisposición al mareo me obligó a solicitar mi cambio a la Fuerza Aérea y completé mi entrenamiento, con mucho esfuerzo, como piloto de combate, más tarde serví tres años en Alemania, luego de los cuales solicité y fui aceptado en el Masachusetts Institute Technological, donde obtuve la maestría en aerodinámica y tecnología espacial, durante ese período contraje matrimonio con mi esposa Dorothy.

Sin dudas la vocación de ser astronauta ya estaba apareciendo, verdad?
Exacto, ya tenía ideas cercanas a eso, pero aún necesitaba ascender como piloto y en la carrera militar, situación que me llevó a solicitar mi pase a la Base Edwards donde serví dos años, en eso apareció en el diario Los Angeles Times, una convocatoria para aspirantes a astronautas que realizaba la NASA, entusiasmado con la idea llené la solicitud y tras largos entrenamientos fui seleccionado como candidato en 1966, ese año nos mudamos a Houston.

Que grupo de astronautas integró y que otros astronautas lo acompañaron en esa selección?
El grupo que integraba era el grupo 5 de astronautas de la NASA, conformado por 19 astronautas, mis compañeros más cercanos de ese grupo fueron Ken Mattingly, que voló conmigo en la mision Apollo 16, Fred Haise y Jack Swigert de Apollo 13 y Edgard Mitchell de Apollo 14, pero tengo muy buenos recuerdos de todos ellos incluso con astronautas de otros grupos como Neil Armstrong y John Young.

Como describiría su viaje a la Luna?
Primero lo describiría como la culminación de seis años de intenso entrenamiento y dedicación, interminables sesiones en los simuladores que luego culminarían en el Apollo 16, junto a mis compañeros John Young y Ken Mattingly, en abril de 1972.
Aún recuerdo los momentos previos al despegue y la vibración de todo mi cuerpo durante el encendido del cohete Saturno V que nos llevó a la Luna, en cuestión de segundos cruzamos la atmósfera terrestre y así comenzó el primer día de los once más emocionantes de mi vida.

Aplausos y distinciones para Charles Duke

Cuales fueron sus primeras sensaciones en el espacio?
“Sin dudas lo más espectacular que un hombre puede ver es la Tierra desde el espacio, allí estaba a más de 20.000 km de distancia con todos sus océanos, continentes y nubes, colgada del negro cosmos. Ya en la Luna no salía de mi asombro, era una quietud y una soledad increíbles, lleno de paisajes y cráteres donde solo se distinguen tonalidades de gris, me sentí un privilegiado de haber sido uno de los doce hombres que tuvo esta experiencia.

Habiendo sido astronauta suplente en la fallida misión Apollo 13, que opinión le merece el film homónimo?
Es una muy buena película desde las actuaciones de Tom Hanks y su elenco hasta los detalles técnicos que allí se muestran, como los modelos de la naves Apollo y otros datos históricos hacen de esta una película muy veraz y acorde con los acontecimientos que sucedieron en abril de 1970.
Por supuesto, hay algún que otro detalle Hollywoodense para agilizar la narración, pero en general refleja la realidad, la misión Apollo 13 tuvo mucha aventura verdadera.


Con el caminante lunar al finalizar la conferencia

Que le deparó en su vida el vuelo a la Luna ?
A pesar de haber viajado a los cielos no había encontrado a Dios en mi viaje, ni en las Iglesias, lo único que había encontrado era mi matrimonio resentido por lar largas ausencias y dedicación que había puesto en el programa Apollo, pero ahora Dorothy estaba deprimida porque su vida era nuestro matrimonio y el mismo estaba fallando, además luego de finalizar el programa Apollo, mi meta estaba cumplida y no encontraba otras metas a cumplir, así que me dediqué a los negocios y fundé mi propia empresa con el objetivo de lograr un éxito económico.

Y después de todo, cuál es su idea acerca de Dios?
Antes de la misión iba a la Iglesia con desinterés y leía la Biblia sin creerla, solo consideraba a Dios como un Gran Maestro, pero luego de dejar la NASA, mi esposa me habló acerca de cómo sus oraciones le habían dado un sentido positivo a su vida y comencé a acompañarla en sus estudios de la Biblia, había comprendido que ella me amaba tal cual era y luego de leer el Génesis, de pronto, la venda se apartó de mis ojos y comprendí que Dios había amado a Charlie Duke, y a cada uno de nosotros, desde que creó al mundo.
Dotty y yo comenzamos a orar por los enfermos y hemos sido testigos de verdaderos milagros de Dios, sordos que han vuelto a oír y enfermos de cáncer sanados.
Si tuviera que resumir mi idea de Dios diría que así como, en 1972, viajé en el Apollo 16 a la Luna en una fantástica aventura, y decía que podía vivir 10.000 años, ahora sé que nada se compara con la aventura de conocer a Dios, una aventura que dura para toda la vida.


Autógrafo de Chales Duke

Gracias a Charles Duke por su infinita paciencia !!

Biografía de Charles Duke

19 febrero 2007

16º Aniversario de la caída de la Salyut 7 en Argentina


Este año se cumplieron dieciseis años de la caída de la estación espacial Salyut 7 en territorio argentino, la vieja antecesora directa de la estación MIR cayó en una accidentada trayectoria el 9 de febrero de 1991, luego de haber orbitado la Tierra por más de nueve años, tres más de los previstos.

Les propongo recorrer su historia al tiempo de ver fotos de algunos restos recuperados que cayeron sobre nuestro país.


Tanque esférico de combustible perteneciente a la Salyut 7, hallado en Entre Ríos

La última estación de la serie Salyut (que significa saludo) albergó a once tripulaciones, entre los cuales se encontraron la segunda mujer en el espacio Sveltana Savistkaya, que también fue la primera mujer en volar dos veces y efectuar una actividad extravehicular, también hubo varios cosmonautas de otros países como Jean Loup Chretién, de Francia y Rakesh Sharma, de India, y antes de ser reemplazada por la MIR, sirvió como base de numerosos experimentos y pilar para batir récords de permanencia en el espacio.

La Salyut 7 tiene bastante de la historia de los vuelos espaciales tripulados en su haber y antes de los detalles de su destino final daremos un vistazo de su trayectoria en sus años de vida útil que tuvo, y un poco más también.

Al mejor estilo de los rusos, la Salyut 7 fue lanzada el 2 de abril de 1982, bajo el más estricto secreto, mediante un cohete protón D-1, su utilidad era reemplazar a la Salyut 6 que tan buena performance había tenido, poseía dos puertos de acople para naves tripuladas Soyuz y cargueros Progress, una longitud de 14 metros y un peso de 80 toneladas.


Circuitos y transistores de la Salyut 7 expuestos en el observatorio de Oro Verde, Entre Ríos

La primera tripulación que habitó la Salyut 7 fue la de la Soyuz T-5, integrada por el novato Anatoly Berezovoi y Valentín Lebedev, que ya había volado en la Soyuz 13, los cosmonautas despegaron el 13 de mayo de 1982 llegando a la estación dos días después, listos para batir un nuevo récord, además de realizar experimentos en astrofísica y astronomía.

Al mes siguiente, el 25 de junio, llegan a la Salyut 7 nuevos cosmonautas, se trata de la tripulación de la Soyuz T-6 integrada por Vladimir Dzanibekov, veterano de dos vuelos anteriores, Alexander Ivanchenov con un vuelo y el novato y astronauta de la ESA, el francés Jean Loup Chretién, durante los siguientes siete días, estos tres cosmonautas comparten trabajos y estadía en la Salyut junto con Berezovoi y Lebedev, que estaban buscando romper el récord de permanencia.

Circuito del tablero de comunicaciones de la Salyut 7


Detalle del mismo circuito exhibiendo su protocolo de comunicación BIP 10, para modular y demodular señales analógicas y digitales

El 20 de agosto la tripulación vuelve a cambiar, llega la Soyuz T-7 integrada por Leonid Popov, veterano de dos vuelos anteriores, y los novatos Alexander Serebrov y Sveltana Savistkaya, esta tripulación también permanecería en la Salyut por siete días, acompañando a los de la Soyuz T-5 que aún deberían cumplir 120 días más.

A pesar de las breves estadías de estas dos tripulaciones se aprovechaba muy bien el tiempo en la elaboración experimental de cristales de silicio en los microhornos que la Salyut tenía, favorecida por la microgravedad.

Récord espacial
Finalmente tras 211 días en el espacio, el 10 de diciembre de 1982, Berezovoi y Lebedev retornaron a la Tierra trayendo muchos resultados de los experimentos y un nuevo récord de permanencia, con el final de esta misión se cerraba el primer capítulo de la vida de la Salyut 7.

El siguiente año sería un poco accidentado para la Salyut y sus tripulantes, los cosmonautas Vladimir Titov, Guennadi Strekalov y Alexander Serebrov que recientemente había estado en la estación, integraban la tripulación de la Soyuz T-8 y estaba dispuesta a batir el récord de Berezovoi y Lebedev, despegaron en la madrugada del 20 de abril de 1983, pero los controles de alineación fallaron apenas llegaron a la órbita terrestre, al intentar corregir esa falla se había empleado demasiado combustible y energía eléctrica y se habían excedido los límites de seguridad para intentar acoplarse a la Salyut, por lo que se decidió abortar.

Fragmento de una cubierta de escotilla de la Salyut

La misión luego de dos días en el espacio, se sabe que la Soyuz eyectó una pequeña cápsula, antes de reingresar a la atmósfera, ignorándose su propósito y contenido.

Con uno de los tanques de la Salyut 7


Por este hueco de filtró aire caliente durante la reentrada en la atmósfera fundiendo parte de la esfera

Ya había transcurrido la mitad del año 1983 y la salyut 7 seguía deshabitada, hasta que la Soyuz T-9 al mando de Vladimir Liakhov y Alexander Alexandrov pusieron rumbo a la Salyut el 27 de junio. Hubo mucha incertidumbre durante las maniobras de acople, debido al fracaso anterior, ya que la Salyut requería mantenimiento y fracasar de nuevo sería catastrófico, pero el acople se realizó exitosamente.

Una vez llegados Liakhov y Alexandrov se encontraron con un nuevo módulo acoplado a la Salyut 7, se trataba del satélite Kosmos 1443, de trece metros de longitud, poseía una forma cónica y le agregaba a la Salyut 7, 50 metros cúbicos de capacidad, a los 90 que ya tenía la Salyut 7, para desarrollar experimentos y para vivienda, los cosmonautas llamaron a este módulo la "habitación extra", fue una manera de experimentar el agregado de módulos que luego se realizarían con la estación MIR.

No es un paisaje lunar, es un detalle del casco de la Salyut 7 acribillado por micrometeoritos

El complejo Kosmos-Salyut-Soyuz, formaba lo que muchos llamaron el tren espacial, y así se mantuvo hasta el 19 de septiembre, ya que se necesitaba ese lugar parael acople de la Soyuz T-10 que llegaría en unos días. El Kosmos 1443 se separó de la Salyut y retornó a la Tierra consumiéndose en la atmósfera, pero previo a eso había soltado una pequeña cápsula conteniendo films secretos que fue recuperada en Asia Central.

El relevo de la Soyuz T-9 no se pude llevar a cabor. La Soyuz T-10 integrada por Titov y Strekalov, que ya habían estado en la fracasada Soyuz T-8, estaba a punto de despegar el 26 de septiembre pocos días después del retorno del Kosmos, cuando una violenta explosión incendió el pad de lanzamiento y amenazaba con matar a los ocupantes del mismo, la pericia de Titov hizo que activara la torre de escape y eyectara la cápsula lejos del cohete siniestrado, un sistema similar al de los cohetes Saturno V que llevaba las naves Apollo a la Luna, la misión se abortó pero los cosmonautas salieron ilesos.


Botonera y restos del tablero de comunicaciones

Este accidente motivó que los tripulantes de la Salyut se quedaran sin nave de relevo, por lo tanto tuvieron que retornar a la Tierra, con las ganas de batir el récord de permanencia, el día 23 de noviembre, tras 150 días en el espacio.

Tripulación internacional

Una nueva Soyuz, llamada Soyuz T-10b tripulada por Leonid Kizim, Vladimir Soloviev y Oleg Atkov llega a la Salyut el 10 de febrero de 1984 con el objetivo de imponer otra marca de permanencia espacial. Durante su estadía reciben a la tripulación internacional de la Soyuz T-11, integrada por Yuri Malishev, Guennadi Strekalov y Rakesh Sharma, el primer cosmonauta indú, que colaboró con la medicina espacial, al incorporar técnicas de meditación para contrarrestar los efectos nocivos de la falta de gravedad, permanecen siete días durante el mes de abril.

La siguiente tripulación visitante, la Soyuz T-12, llegados el 18 de julio, llevaría nuevamente a la Salyut 7 a Vladimir Dzanibekov y a Sveltana Savistkaya, junto a Igor Volk, por primera vez seis cosmonautas habitan la Salyut 7, esta tripulación permanece diez días y entre los seis conformaron el grupo más experimentado que habitó esta estación espacial, la tripulación Soyuz T-10 por la larga permanencia que estaba cumpliendo y la T-12 por su experiencia en varios viajes anteriores.

La tripulación de la Soyuz T-12 retornó a la Tierra el 29 de julio y la T-10b el 2 de octubre logrando 237 días de permanencia en el espacio, un nuevo récord y un cierre exitoso de este año.

Tornillo de ajuste para el cierre de la escotilla de acceso

El 7 de marzo de 1985 un problema inesperado amenazaba a la Salyut 7, ese día sin ninguna causa aparente se había perdido todo contacto con la estación, si bien no había ningún cosmonauta a bordo, la situación era grave, los intentos por restablecer el contacto era inútiles, la Salyut erraba muda por el espacio, al no conocer su posición todo intento por acoplarse a ella sería un fracaso, pero los rusos no querían resignarse a perderla, ya que consideraban que aún no había terminado su vida útil.

El 6 de Junio se lanzó una misión de rescate, la Soyuz T-13 integrada por Vladimir Dzanibekov y Viktor Savinik, poseía sistemas novedosos para realizar el acople, como por ejemplo un telémetro láser que permitía acoplarse a la Salyut 7 incluso en el lado nocturno de la órbita terrestre. Los experimentados cosmonautas acoplaron en la Salyut dos días después y se trasladaron a su interior, allí se encontraron con una Salyut 7 oscura y con una temperatura ambiente de dos grados bajo cero.

Muy abrigados y con linternas descubrieron que la falla se había originado en un sensor que posibilitaba la carga de la células de energía por medios de los paneles solares, al fallar ese sensor las baterías estaban vacías y consecuentemente, los sistemas de vida sin funcionar.

Habiendo reparado este problema la vida volvía de a poco en la estación, para el 13 de junio los sistemas de propulsión volvían a operar, y tres días más tarde al agua circulaba por las tuberías derritiendo todo el hielo que se había formado, también se habían restablecido las comunicaciones.

El 17 de septiembre una nueva tripulación, la Soyuz T-14, fue lanzada rumbo a la Salyut para elaborar nuevos experimentos junto con los de la T-13 que ya la había rescatado. Estaba integrada por Vladimir Vasyutin, Georgi Grechko y Alexander Volkov.

Luego de 60 días el comandante Vasyutin comenzó a experimentar malestares y debió regresar a la Tierra, en la Salyut quedarían Volkov y Savinik para completar la misión experimental que se prolongó hasta el 29 de noviembre cuando regresaron.

El año 1986 arrancó con la Salyut deshabitada, otra vez, pero con una gran novedad, sería su último año, el 20 de febrero la MIR su sucesora era lanzada al espacio y pronto su primera tripulación estaría trabajando en ella, la Soyuz T-15 integrada por Leonid Kizim y Vladimir Soloviev, pero mientras estaban en la MIR le hicieron una visita a la Salyut 7.

Así fue como por primera vez en la historia espacial una tripulación visitaba dos estaciones espaciales, Kizim y Soloviev estuvieron en la Salyut 7. desde el 6 de mayo hasta el 25 de junio de 1986, luego retornaron al MIR, fue la última vez que la Salyut albergó cosmonautas.

Una noticia más de la Salyut 7

Mientras en la MIR se sucedían los primeros éxitos, la Salyut 7 continuaba en órbita sin tripulantes, hasta que su vida útil terminó en 1991 y los rusos decidieron sacarla de órbita, el 9 de febrero de 1991 la Salyut 7 reingresaría a la atmósfera y se desintegraría.

La vieja estación estaba destinada a caer en el Pacífico sur al término de su vida útil, pero los controladores rusos se vieron en problemas y no pudieron impedir que la madrugada del 9 de febrero, los restos de la nave regaran una larga lonja del centro de la Argentina, especialmente en las provincias de Santa Fe y Entre Ríos.

El astrónomo Luis Trumper, presidente de la Asocieción Entrerriana de Astronomía (AEA), fue el responsable directo de la recuperación de los restos, según él, los más grandes de la desintegración cayeron en un campo de la localidad de El Chañar, en el norte de Entre Ríos, y fueron recuperados por el gobierno provincial quien los cedió a la AEA para que fueran exhibidos al público en su sede.


Observatorio de Oro Verde, Entre Ríos, donde se hallan algunos restos de la estación, a la izquierda la escotilla para las actividades extravehículares

Trumper detalla que, entre otros escombros, pueden verse circuitos eléctricos, una ventana de lo que parece ser vidrio muy grueso y la escotilla completa, por la que pasaron todos los huéspedes de la Salyut 7, incluida Svetlana Savitskaya, la primera mujer en habitar una estación espacial. Los restos se pueden ver en el Observatorio de Oro Verde a 10 Km. de Paraná en Entre Ríos, participantes de un capítulo más de la historia de los vuelos tripulados, sinceramente es imperdible para quienes puedan acercarse hasta allí.

Oscar Turone
Otro que atesora en su domicilio particular del barrio de Liniers, en la ciudad de Buenos Aires, algunos restos de la vieja Salyut, es el especialista en meteorítica Oscar Turone ex-miembo de LIADA (Liga Iberoamericana De Astronomía).

Datos de la estación Salyut 7

Largo total : 14.4 mts.
Diámetro : 4.2 mts.
Peso : 20 Ton.
Inclinación de la órbita : 51º 6'
Perigeo : 279 Km.
Apogeo : 284 Km.

Las fotos fueron tomadas por Roberto Solans, editor de espacial.com durante una reunión de los integrantes de Contacto con Oscar Turone, gracias a ellos reconstruímos esta historia.

12 febrero 2007

Se viene la STS-117 : Rick Sturckow


En octubre de 1997, un mes después de la primera visita de Fernando Caldeiro como astronauta en el Planetario de la Ciudad de Buenos Aires, recibimos la visita de otros tres astronautas de la NASA, se trataban de Robert Cabana, Jerry Ross y Rick Sturckow, en aquel entonces eran tres de los futuros integrantes de la STS-88, la misión de transbordador que acoplaría el primer módulo de la Estación Espacial Internacional, el Nodo 1.

Cabana y Ross ya eran veteranos del espacio, este último ya había acumulado varias horas de actividades extravehículares y luego se convertiría en el hombre que más veces fue al espacio con siete misiones en su haber.

El piloto de la STS-88 sería Rick Sturckow, un "rockie" que esperaba debutar en el espacio, hoy es todo un veterano con dos vuelos en su haber, la STS-88 como piloto y la STS-105 como comandante.

En marzo de este año volverá al espacio por tercera vez comandando la misión STS-117, la misma que llevará a la Estación Espacial Internacional a James Reilly.



Fotografía autografiada de Rick Sturckow


Los tres astronautas brindaron una conferencia acerca de como sería esa misión que ene se entonces estaba a más de un año en el futuro y hoy es un hito de la historia de los vuelos espaciales tripulados, además profundizaron detalles acerca de la puesta en órbita del satélite argentino SAC-A de la CONAE, el cual sería liberado desde la bodega del transbordador.

Al finalizar la conferencia tuve la oportunidad de charlar en privado con Sturckow, le pregunté si estaba muy ansioso por ser primera misión a lo cual me contestó en un pausado inglés que no, al ensayar tanto en los simuladores las maniobras ya las ejecutan mecánicamente y cuando llega el momento del vuelo es casi una rutina más.

Cabana y Ross también fueron muy amigables a la hora de las preguntas y de recibir saludos, aquí sus autógrafos :


Autógrafo de Robert Cabana


Autógrafo de Jerry Ross

Lamentablemente no hubo un buen anuncio de prensa de su visita, tan solo un breve texto que anunciaba una charla acerca de la Estación Espacial, pero nadie decía quienes la daban, de haberlo sabido hubiera llevado mi cámara, al menos me quedan el recuerdo de sus firmas y de haber conocido a tres grandes exponentes de la astronáutica.


Cabana, Ross y Sturckow en el Planetario de Buenos Aires

Quiero rescatar esta foto de la prensa local (Diario Clarín) publicada al día siguiente de su visita.

Caban, Ross y Sturckow luego viajarían al sur de nuestro país, a Bariloche, donde se ubica la empresa INVAP responsable de la integración del satélite SAC-A de la CONAE.

Biografía de Rick Sturckow

Biografía de Robert Cabana

Biografía de Jerry Ross

08 febrero 2007

Se viene la STS-117 : James Reilly


En septiembre de 1998 tuve la oportunidad de conocer al astronauta James Reilly, especialista en misión y veterano del espacio, en aquel entonces tenía en su haber la misión STS-89, que lo había llevado a la estación espacial rusa MIR.

Reilly nos visitó, junto a Fernando Caldeiro, en la Feria de la Flor en Escobar, si bien no sabía hablar castellano, Fernando ofició de traductor y nos brindó una interesante charla donde nos contó su pasado como geólogo y su interés por nuestro país.


James Reilly y yo en la Fiesta de la Flor en Escobar en 1998.


Años después, en el 2001, volvió al espacio en la misión STS-104, encargada de llevar la cámara de presión Quest a la Estación Espacial Internacional y ahora le tocará el turno de volar por tercera vez en marzo de este año, en la misión STS-117, nuevamente a la ISS y con la gran misión de colocar un nuevo juego de paneles solares.

A pesar de no hablar nuestro idioma Reilly demostró una gran simpatía y también paciencia para un público, que no paraba de hacerle preguntas y más preguntas, además de pedirle autógrafos (yo inluído ! ja ja !) de todas maneras se esforzó en dedicarme por escrito unas palabras en castellano, lo cual constituye una rareza, además de Fernando Caldeiro, Reilly es el único astronauta que me firmó de esa manera :


"Para Diego Con mucho Gusto"

Más imágenes de la visita de Reilly, junto a Fernando Caldeiro, a nuestro país :






Biografía de James Reilly

Desde aquí le deseo la mejor de las suertes en la próxima misión !!.

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